EL ADMINISTRADOR

Notas interesantes de Administración y Negocios en el Perú.

jueves, 23 de agosto de 2007

EL MULTINIVEL

Tus padres te dan una carrera. Te gradúas y buscas trabajo. El problema de buscar trabajo es que no tienes experiencia. Quieres un negocio pero no tienes ni experiencia ni dinero. Por fin después de mucho tiempo encuentras un puesto de ayudante del auxiliar del secretario, del gerente de la sucursal, empiezas desde abajo. Te casas, rentas un apartamento, adquieres un auto usado, dos hijos, un perro, un canario y muy poca comida. No te alcanza para más. Te preguntas: No logro entender, si trabajo mucho, ahorro lo más que puedo, no tengo casa grande, algo está fallando. No tienes ni una vaga idea de tu error, cual será la solución para salir de pobre??. Se debe a que tus ingresos son lineales. Si trabajas cobras, no trabajas no cobras. Tu te dices. "Pero eso no me importa, yo nunca falto, soy muy cumplidor y siempre recibo mi dinero", y entonces cuando llegan los cobradores quedas igual que antes o peor, de quién es el problema?. Tus padres y la escuela te han educado para ser trabajador, estar dependiendo de un patrón. El empleado trabaja 12 horas, haciendo lo menos posible pero tratando de conservar su empleo. El patrón exige lo más posible, paga lo menos posible para que tú conserves tu empleo. Nada hay de malo en ser un empleado, pero el que actúa de esta manera aspira solo a trabajar para otros. Un día te das cuenta que tienes familia, tienes muchos gastos, la vida es muy cara, necesitas ganarte el sustento y trabajas por un salario. Cuando tienes un salario fijo, aceptas que indirectamente una tercera persona, tu patrón, decida tu estilo de vida. Te preguntas ¿a poco mi jefe decide todo?. Tu patrón decide tu sueldo y por tanto tu ropa, tu> casa, tus vacaciones, tu automóvil, la escuela de tus hijos y hasta lo que comes. Como empleado estas expuesto a las decisiones e improvistos de tu jefe y te afecta de tal modo que puedes perder lo que tienes. Si te accidentas cobrarás tu seguro, que nunca es suficiente para vivir. Si te despiden tus ingresos son igual a cero. Si te jubilas te dicen felicidades, muchas gracias por tus 45 años de trabajo, adiós. Conclusión: nunca serás rico trabajando para otros. Dos de cada 100 empleados logran acumular riquezas. Tú te matas trabajando y no tienes resultados y terminas como tu jefe. Tienes dinero pero eres esclavo de su negocio. No tienes tiempo para descansar. Le tienes amor al trabajo pero sacrificas tu salud por ganar dinero y el dinero solo te sirve para ganar algo de salud. Lo que tienes que entender es que tú tienes la capacidad de escoger tu estilo de vida. La cuestión de que hacer con tu vida, tus ingresos, tu tiempo y tu persona es decisión exclusivamente tuya. Estilo de vida que es?. Estilo de vida es elegir la casa y el barrio donde vas a vivir, la escuela de tus hijos, vestir la ropa que más te guste, tener dinero excedente y poder viajar. Tener un estilo de vida es tener tiempo para disfrutar la vida. Tener salud para disfrutar la vida. Tener dinero para disfrutar la vida. Estilo de vida es que tú y no otros, tu patrón o el banco dirijan tu propia vida. Que pasó con los sueños que tenias. La realidad económica muchas veces aplastó tus sueños, obligándote a ajustarlo a tus ingresos. En esta situación te quedan dos opciones: desinflas tus sueños o aumentas tus ingresos. Si desinflas tus sueños terminas siendo un infeliz. Aumentar tus ingresos, te motivas a seguir soñando. Que quieres?. Que vas a hacer tú?. Si sigues ganando ingresos lineales solo te alcanzaran para sobrevivir. La solución son los ingresos residuales. Son aquellos ingresos que logran hacer aquellos que hacen una fortuna y no son los que trabajan más que tú. Por ejemplo: Elvis Presley sigue cobrando millones de dólares después de varios años de descansar en paz. Gana más Elvis de muerto que de vivo. El secreto de los ingresos residuales es el mismo para él que para ti. Hacer un trabajo una sola vez y que sea posible cobrar cada vez que se vuelva a usar "los> derechos del autor". El que recibe ingresos residuales puede irse de vacaciones y recibir las ganancias el tiempo que se acumularon durante su ausencia. Tú no necesitas una educación especial o abandonar la seguridad de tu actual trabajo para participar de los ingresos residuales. La solución: Multinivel. No hay un sistema de mercado que compita contra él en cuanto a costos y beneficios. El Multinivel es un negocio de ingresos residuales. Trabajas una sola vez y tu trabajo se duplica, triplica, cuadruplica, etc. y tus ganancias también. A veces confundido como pirámide, no lo es, no son ventas, no necesitas mucho dinero para invertir, no te quita mucho tiempo, no es para ricos y no necesitas experiencia. Es tu propio negocio. Consumir e invitar a consumir porque así formarás tu propia empresa. El Multinivel es un negocio, como tal, hay que trabajar para ponerlo en marcha. Recuerda: nunca serás rico trabajando para otros. En un trabajo tradicional a la larga ganas lo mismo. Felicidades! !!!! te dan un aumento de 20%. Los precios suben un 40%. Con Multinivel, si aumentas tus ingresos, cada vez ganas más. Como empleado si no das resultado hasta ahí llegaste. Bien: piensa como estabas hace tres años y como estas ahora? Imagina como vas a estar dentro de tres años, entonces de que lado vas a estar. 1) Serás tu propio jefe? o 2) Serás un feliz empleado?. Tú decides .......

sábado, 11 de agosto de 2007

BILL GATES EN LA FAMOSA UNIVERSIDAD DE YALE

En la famosa Universidad de Yale, hace dos años el señor Bill Gates dió una conferencia dirigida a estudiantes y padres de familia (padres sobreprotectores con unos hijos muy consentidos que sienten que todo lo merecen), en la cual expuso 11 reglas que aunque duras son necesarias en la vida real.

La charla de Gates se resumiría en las siguientes once duras reglas:

Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.
Regla Dos- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.
Regla Tres- No ganarás US$ 5,000 mensuales justo después de haber salido de la universidad y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros.
Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.
Regla Cinco- Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: le llamaban OPORTUNIDAD".
Regla Seis- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.
Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son. Ahora ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.
Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre Ganadores y Perdedores", pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.
Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones largas de verano en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
Regla Diez- La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café, de la película, etc. para irse a trabajar.
Regla Once- Sé amable con los "NERDS" (los más aplicados de tu clase). Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos.

- Si bien es cierto son reglas duras, vale la pena compartirlas, porque no? sacadas de la vida real y de la experiencia de uno de los hombres más exitosos de la historia empresarial del mundo.

"No tengas miedo de ir despacio, teme quedarte quieto "

viernes, 10 de agosto de 2007

ENSEÑANZA DE MARSHALL GOLDSMITH EN SU LIBRO "COMO LAS PERSONAS DE NEGOCIOS DE EXITO PUEDEN HACERSE AUN MAS EXITOSAS"

El poder de la estrategia de Goldsmith reside en su simplicidad. No hay fórmulas extravagantes para convertirse en un jefe mejor, ningún artificio terapéutico, ningún método secreto o técnicas patentadas. No hay parábolas largas de gente moviendo quesos o icebergs que se derriten.

Este libro es un libro sobre etiqueta. Más centrado en el comportamiento interpersonal básico que en técnicas refinadas de gestión, el insight básico de Goldsmith es que una buena educación es sinónimo de buena gestión.

Un compañero tácito para el libro de Stephen Covey, Los siete hábitos de las personas altamente eficaces, el libro de Goldsmith está estructurado en torno a los malos hábitos que impiden a las personas de mayor éxito ser aún más exitosas. El autor observa que, a un cierto nivel profesional, ni la inteligencia ni las habilidades explican el hecho de que algunas personas continúen progresando mientras otras se estancan en determinado nivel y no se mueven de allí. Lo que diferencia a una de la otra, dice, nada tiene que ver con las habilidades de cada uno, su experiencia y su preparación — pero está completamente relacionado con su comportamiento. Goldsmith explica que las personas exitosas generalmente se imponen un límite debido a vicios de comportamiento que ni siquiera saben que poseen. De igual modo, personas de éxito suelen creer que el comportamiento que les llevó donde están las llevará, con el tiempo, aún más lejos. Es en ese punto donde se engañan, porque no se dan cuenta de que el éxito vino a pesar de sus comportamientos equivocados. Ignoran que su comportamiento no les permite sacar todo su potencial, no sólo en el trabajo, también en la vida.

Los malos hábitos de cada uno
El trabajo de Goldsmith tiene como objetivo ayudar a las personas a identificar y a romper con los malos hábitos que interfieren en su trayectoria. El grueso del libro, por tanto, consiste en una discusión fina y reveladora sobre los “Veinte hábitos que impiden a las personas llegar a su máximo”. Son:

1. Vencer siempre: Goldsmith señala que la necesidad del individuo hipercompetitivo de ser mejor que los otros “está en la base de casi todos sus problemas de comportamiento” .

2. Añadir demasiado valor: eso ocurre cuando usted no consigue contenerse y trata todo el tiempo de mejorar ideas perfectamente factibles de sus compañeros o subordinados. “Es extremadamente difícil”, observa Goldsmith, “para las personas exitosas, oír de otros alguna cosa que ellas sabían sin con ello transmitir un mensaje del tipo (a) ‘yo ya sabía de eso’ y (b) ‘hay un modo mejor de hacerlo’”. La falacia de ese tipo de comportamiento es que, aunque pueda mejorar un poco la idea, reduce drásticamente la dedicación del otro a ella.

3. Ser muy crítico: “No es correcto criticar cuando se pide a alguien que dé su opinión [...] aunque usted haga una pregunta y esté de acuerdo con la respuesta”. Goldsmith recomienda “contratar” un amigo para que le cobre diez dólares de multa cada vez que usted haga una crítica innecesaria.

4. Hacer comentarios destructivos: todos nos sentimos tentado a comportarnos de manera insensible o mezquina de vez en cuando. Pero, cuando sintamos el antojo de criticar, deberíamos darnos cuenta de los comentarios negativos gratuitos pueden interferir en nuestra relación de trabajo. “La cuestión, en realidad, no es saber si eso o aquello es verdad o no, sino si vale la pena”. Ése es otro hábito que Goldsmith recomienda que se rompa mediante una multa.

5. Siempre comenzar una frase con “No”, “Pero” o “Sin embargo”: casi todos hacemos eso, y la mayoría de nosotros no lo percibe. Goldsmith, sin embargo, dice que si prestáramos atención, “veríamos cómo las personas imponen esas palabras a los otros para ganar o consolidar su poder. Veremos también cómo las personas se quedan tremendamente resentidas a causa de ello, conscientemente o no, y el modo en que ese comportamiento ahoga la discusión, en lugar de promoverla”. Ése es otro hábito que puede exigir el cobro de una multa.

6. Decir al mundo lo inteligentes que somos: “Ésa es otra variación de nuestra necesidad de vencer”.

7. Hablar cuando se está enfadado: ver número cuatro.

8. Negatividad, o Déjenme “explicar por qué eso no va a funcionar”: Goldsmith describe ese tipo de comportamiento de negatividad “pura y sin adulteración, sin embargo disfrazada por la voluntad de ayudar”.

9. Retener información: este mal hábito tiene que ver con el poder. Goldsmith muestra cómo incluso las personas mejor intencionadas hacen eso todo el tiempo. “Actuamos de ese modo cuando estamos demasiado ocupados para pasar a alguien información importante. Actuamos así cuando delegamos una tarea a nuestros subordinados pero no gastamos tiempo con ellos mostrando exactamente como queremos que se ejecute la tarea”.

10. Dejar de reconocer el mérito de alguien: “Este comportamiento es primo del anterior.”

11. Exigir reconocimiento por algo que no hicimos: para descubrir cuándo hacemos eso, Goldsmith recomienda que hagamos una lista de todas las veces que nos elogiamos durante el día. Después, sugiere que repasemos la lista para ver si merecíamos tanto crédito.

12. Ofrecer disculpas: hacemos eso de forma clara (culpando al tráfico de nuestros fallos, o a la secretaria, o a cualquier cosa que no sea nosotros mismos) y sutilmente (a través de comentarios autodespreciativos sobre como solemos atrasarnos siempre, o aplazar los compromisos, o perder el buen humor. En otras palabras: “Es así cómo soy yo”).

13. Que se quede anclado en el pasado: “Entender el pasado es perfectamente admisible si lo que está en juego es aceptar el pasado. Pero si usted está preocupado en cambiar el futuro, entender el pasado no va a ayudarlo en esa empresa”. Goldsmith observa que, muchas veces, nosotros nos anclamos en el pasado porque nos permite culpar a los demás de cosas que salieron mal en nuestra vida.

14. Privilegiar a los favoritos: ese tipo de comportamiento crea aduladores; premiar aduladores crea líderes superficiales.

15. Rechazar pedir disculpas: “Cuando usted dice, ‘Siento mucho’, usted gana aliados, y más que eso, gana compañeros”. La primera cosa que Goldsmith enseña a sus clientes es “pedir disculpas — cara a cara — a todo compañera de trabajo que haya acordado ayudarlos a mejorar”.

16. Rechazar oír: ese tipo de comportamiento se expresa por medio de frases del tipo: ‘Poco me importa lo que le vaya a suceder; ‘No le comprendo; ‘Está equivocado; ‘Usted es un idiota’, y Usted ‘está haciéndome perder el tiempo’.

17. Dejar de expresar gratitud. “La gratitud no es un recurso escaso, tampoco un recurso caro. Es tan abundante como el aire. Nosotros la inspiramos, sin embargo nos olvidamos de expirarla”. Goldsmith aconseja romper con el hábito de nunca agradecer, haciéndolo, al mayor número posible de personas a nuestro alcance, sin descanso.

18. Castigar al intermediario: ese hábito es un híbrido sórdido de los puntos 10, 11, 19, 4, 16 y 17, con una fuerte dosis de ira mezclada.

19. Pasar la responsabilidad: “Éste es el fallo de comportamiento por el cual juzgamos a nuestros líderes — se trata de un atributo negativo tan importante como las cualidades positivas de capacidad mental o coraje”.

20. Una necesidad excesiva de ser “yo mismo”: haciendo “de nuestros vicios virtudes” porque expresar quienes somos tiene como resultado una lealtad equivocada, lo que puede llegar a ser “uno de los obstáculos más difíciles de vencer para hacer un cambio positivo y duradero de nuestro comportamiento” .

Goldsmith incluye otro hábito en la lista: la obsesión por la meta o, en otras palabras, una implicación tan elevada por el cumplimiento de una meta que acabamos perdiendo el foco en la razón por la cual trabajamos tanto, y lo que de hecho vale la pena en la vida.

La belleza de la estrategia de Goldsmith reside no sólo en la simplicidad de su insight, también en la claridad de sus consejos. Como es nuestro comportamiento el que nos hace quedarnos atrás, dice, podemos cambiar nuestro futuro cambiando la forma en que actuamos. El secreto para un futuro mejor yace igualmente en saber oír lo que otros tienen que decir sobre nuestro comportamiento. Aprendemos mejor si las lecciones que los otros nos quieren enseñar nos llegan no como feedback —que tiene la forma de un pasado que no se puede cambiar, con un énfasis crítico y que nos hace defensivos— sino como feedforward, es decir, como si fueran lecciones que nos permiten construir un futuro mejor y que nos llegan bajo la forma de consejos útiles sobre cosas que podemos cambiar.

En última instancia, el mensaje de Goldsmith es muy objetivo: el secreto del éxito corporativo es trabajar en armonía con los demás. Si eso le parece sabiduría de jardín de infancia, es porque lo que es, pero es también la materia prima del coaching empresarial y por un buen motivo.

Los reality shows de la televisión que se centran en competiciones profesionales dramatizan la verdad básica del argumento de Goldsmith. Es el caso del Aprendiz, de Donald Trump, o de cualquier otro programa dedicado a la vida profesional y al éxito, como Top Chef, Project Runway y Top Design. Con mucha frecuencia, ese tipo de programa muestra que, en realidad, lo que impide a las personas de ingenio progresar en sus carreras es una incapacidad básica de jugar —o trabajar— limpio. Los individuos talentosos que aparecen en esos programas son tan competitivos que no cooperan con los compañeros. Ellos están tan llenos de sí mismos, que no oyen a sus clientes. Son tan reacios a dar el debido crédito a los demás, haciéndolo suyo indebidamente, que acaban enfadando a posibles aliados y compañeros. En varios episodios, un programa después de otro, vemos profesionales, de modo general brillantes, innovadores y capaces, fracasando estrepitosamente porque rechazan oír, compartir, nunca dicen gracias y evitan decir que lo sienten mucho.

Por eso estos programas, tan seductores a los egos de las personas por sus promesas de adelanto profesional, dedican tanto tiempo a desafíos que giran en torno al trabajo de equipo. La estructuració n de los programas en torno a iniciativas participativas deja claro cómo la necesidad de vencer puede llevar al individuo a la derrota. Los insights de Goldsmith no deben de modo algún limitarse a la empresa. Pueden ser aplicados al hogar, según él insiste en observar, y pueden hacer maravillas por la armonía familiar. A fin de cuentas, el motivo por el cual Goldsmith se gana la vida enseñando a los ejecutivos a oír y a decir gracias se explica por el hecho de que mucha gente jamás aprendió esas cosas en casa cuando era un niño. Si hubieran aprendido, el autor tendría que ganarse la vida de otra manera. Pero, en las actuales circunstancias, Goldsmith tenía que escribir un manual de liderazgo que pudiera ser usado también como guía para la buena paternidad y para la paz conyugal.What got you here won’t get you there: how successful people become even more


LAS LIMITANTES

Muchas personas quieren aprender acerca de las inversiones, pero Robert Kiyosaki (Autor del Libro Padre Pobre Padre Rico) nos aconseja que antes de invertir, debemos aprender a VENDER, ya que si no poseemos esta habilidad, nunca podremos llegar a ser ricos. He aquí algunas de as lecciones que aprendimos acerca de las ventas durante el fin de semana.
1. ¡Debes ser capaz de vender, si quieres comprar!
En otras palabras, tienes que desarrollar la habilidad de vender algo para ganar dinero y poder comprar otras cosas o invertir. Algunas personas piensan que pueden aprender a hacer inversiones sin antes haber aprendido a vender. ¿Qué te parece? La regla de oro en Vendedores Perros, Padre Rico y otras organizaciones, es que si queremos comprar algo, primero tenemos que vender alguna otra cosa para generar un ingreso que nos permita pagar por lo que queremos comprar. A menos que siempre quieras pagar el precio más caro por todo lo que compres, desde propiedades, joyas etc, tienes que aprender a negociar un mejor precio, lo que implica vender una idea.
2. Sólo eres capaz de vender lo que tu autoestima te permite.
Algunas personas pueden generar en un mercado entre 50 y 60 mil dólares en ventas, otros pueden generar cientos de miles y otros pueden generar millones de dólares dentro de ese mismo mercado. ¿Cuál es la diferencia? Esto lo he venido diciendo desde hace mucho tiempo...si tu energía, autoestima y confianza en ti mismo están en un nivel bajo, nunca serás capaz de pedir más de lo que tu energía lo permita. El 99.999% del juego de las ventas está en TU cabeza, no en los prospectos. En algún momento tienes que hacer lo necesario para aumentar tu fortaleza emocional así como mejorar tu imagen ante ti mismo. De otra forma lo que sucede es que te conviertes en el tipo de persona que simplemente se conforma con menos. Algunas personas incluso se vuelven aparentemente agresivas cuando lo que realmente están haciendo es compensar su falta de autoestima. ¡Trabaja para corregir este aspecto de tu vida! Puedes lograrlo con sólo practicar unos minutos diariamente.
3. Debes practicar con el método de prueba y error una y otra vez para que cuando te enfrentes a una situación difícil en la vida real puedas sobreponerte fácilmente.
Recuerda que bajo presión, la emoción sube y la inteligencia baja. Así que al simular los peores escenarios, objeciones y demás, puedes elevar tu confianza para que cuando llegue el momento de la verdad puedas salir victorioso.
4. El mejor vendedor en cualquier negocio debe ser el propio dueño.
Si el dueño de un negocio no puede vender, entonces no hay negocio. Vender la misión del negocio a los empleados, inversionistas, banqueros, vendedores y clientes es algo en que el dueño del negocio debe ser exitoso. De lo contrario, atraerá talento mediocre, malos clientes, vendedores titubeantes y ningún inversionista. Durante años he visto a mucha gente talentosa perseguir sus sueños creando una empresa. Aquellos que han tenido éxito tienen algo en común. Tienen la capacidad de vender en forma masiva. Puedes contratar más gente para que venda por ti, pero tú necesitas ser el mejor vendedor en tu propio negocio. Así que si deseas aventurarte en el cuadrante de los negocios “D”, te sugiero que aprendas a vender antes de siquiera comenzar a desarrollar tu plan de negocios. No caigas en el error de creer que puedes alcanzar el éxito solamente por haber tenido una buena idea, por comprar buena tecnología o por tener un buen equipo contable. Muchos grandes negocios se han construido usando tecnologías mediocres e ideas poco brillantes pero NUNCA sin grandes vendedores. Tienes que aprender a vender y llegar a ser bueno en ello. En uno de nuestros recientes programas de entrenamiento pregunté cuantos de los asistentes habían hecho ventas de puerta en puerta anteriormente. De 200 personas, solamente 15 o 20 levantaron la mano. Este grupo representaba a las empresas más importantes y a los dueños de negocios que había en el seminario.
5. ¡La venta más difícil es la que te haces a ti mismo de tu propia persona! ¿Cuantas veces me has escuchado decir esto? La pregunta es, ¿Para ti, el valor de tu propia persona y de tus propias ideas es alto o bajo? ¿Te auto justificas con frecuencia? ¿Careces de la confianza suficiente para tener éxito, ser respetado o incluso para ser tomado en serio?
En pocas palabras, ¿Te comprarías a ti mismo? Si la respuesta es titubeante, comienza a practicar AHORA y aprende a vender. Robert Kiyosaki fue más allá al decir que venderte a ti mismo una nueva forma de pensamiento es un pre- requisito para establecer un nuevo comportamiento que produzca mejores resultados. La mayoría de las personas quieren saber que es lo que deben HACER para obtener mejores resultados. Esto nunca funciona. Primero debes aprender a PENSAR diferente para poder hacer algo de forma diferente. Mira, lo más probable es que ya sepas qué es lo que DEBES HACER. El problema radica en HACERLO. ¿Por qué? Por que aún no te has vendido a ti mismo una nueva forma de pensar. A veces nos da miedo abandonar los viejos patrones o pararnos en un terreno desconocido donde lo único que nos puede sacar adelante es nuestra habilidad para vendernos a nosotros mismos nuestras propias ideas.
6. La inteligencia y las ventas aumentan bajo presión.
Esta es la premisa en la que se basa toda nuestra enseñanza y aprendizaje, además de ser un requisito para ser exitoso en los puntos anteriores (1-5). La forma en que la naturaleza funciona es que bajo presión, todo tiende a crecer, mejorar o evolucionar. Cuando hay ausencia de presión todo se desmorona. Tienes que ponerte a ti mismo bajo presión y dejar la comodidad para que puedas crecer.
Autor: Blair Singer

UN CONSEJO VALIOSO

Charles M. Schwab, quien transformó la compañía Bethlehem Steel en la más grande productora independiente de acero en el mundo, en una ocasión planteó un desafío durante la comida a un consultor en gerencia llamado Ivy Lee: "Muéstreme una forma en que pueda lograr hacer más cosas con mi tiempo y le pagaré los honorarios que quiera, dentro de lo razonable". Lee le extendió una hoja de papel en blanco. "Escriba cada noche las cosas que tenga que hacer mañana", dijo, y numérelas por orden de importancia. Por la mañana, lo primero que debe hacer es empezar a trabajar en el número 1 de su lista y continuar hasta que lo haya terminado. Luego inicie con el número 2..., el 3..., etc. Al término del día deseche su lista y elabore una nueva. No se preocupe si no logra terminar todas las actividades de su lista. Si no puede con este método, no podrá hacerlo con ningún otro. Pruébelo por unos días y luego págueme lo que crea que vale este consejo".Poco después, Schwab le envió a Lee un cheque por $25,000 USD. Más tarde dijo que ésta era la lección más rentable que pudo aprender en su carrera empresarial